Si la oralidad permitió a nuestros sitieros y esclavos hacer de las noches un espacio para soñar y emanciparse de las duras condiciones de su tiempo, si el miedo y el terror que hacían imprescindibles al abuelo del taburete, servían para crear aquel mundo mágico, si esta fue el caldo de cultivo donde creció nuestro ajiaco de ideas, en una policromía azarosa por sus fragmentaciones, en ocasiones irreconciliables por las pasiones y apetencias, si formó crédulos o incrédulos, si provocó el respeto o la indiferencia; hoy sigue sosteniendo, forjando un espacio al que no se puede renunciar y de cuya legitimidad, depende, en buena medida, la sustentación de nuestro propio reconocimiento. Se traduce en memoria histórica como fuente de sabiduría popular; de ahí que la décima, considerada como nuestra estrofa nacional, haya sido el centro de otro fenómeno cultural imprescindible, el punto cubano.
OCHO SÍLABAS Y UN SON
«El son es lo más sublime para el alma divertir», dice la canción; este es un ritmo alegre para cantar y bailar.
Y se canta y se baila en la Casa de la Décima Celestino García en cada cita sabatina o en cada presentación de los poetas imbricando tradiciones y saberes del patrimonio cultural de la nación.
Desde el Ranchón, cantos a la Historia
La poesía acompaña al hombre desde los primeros impulsos de su impronta existencial. La décima en el punto cubano es crónica por excelencia desde sus principios fundacionales, ha sido vehículo sonoro no solo de vivencias, sino de enaltecimiento humano, combate e intimidad lírica. La Casa de la Décima Celestino García en la voz y la…
Igual que ayer, regresé a este Ranchón…
El sábado es un imán que desde el Ranchón del Guamá indica el norte lírico de los poetas. Los lugareños saben, sin convocatoria, dónde es el guateque; un taller de sueños y tradiciones que convoca: seduce.
Décima oral y escrita en Pinar del Río. Antología
Este libro es el resultado de una investigación que incluye a más de doscientos creadores como muestra de la poética más arraigada de nuestra cubanía y que, desde los inicios del siglo XIX con Celestino García y Francisca González Ruz de Montoro hasta la actualidad con los jóvenes Yasel García y Anabeivi Rodríguez, patentiza en sus ilustrativas páginas la lírica cubana en occidente.
Juan Rodríguez Cabrera: Voz y Tradición
En las múltiples motivaciones que le inspiran, Juanito le canta a su pueblo natal, las riquezas de la vega, el promisorio escenario del tabaco y en el orden espiritual, las lógicas preocupaciones existenciales.
Sinsonte de Plata para Yasel García
La décima, forja espiritual de la nacionalidad cubana en la voz y la pluma de nuestros poetas, ha signado tiempos de fundación, de enriquecimiento histórico y sobre todo de brújula existencial. Los poetas del Ranchón del Guamá asumen este compromiso espiritual con un permanente apego a la cubanía, fieles a la heredad del apostolado de…
José Lorenzo Delgado, el decano del verso improvisado
Siempre nos admiró su sentido de enfocar el verso con toda la plasticidad y colorido de quien verdaderamente presentía la propuesta bucólica, su sensibilidad, gracia y agilidad para concertar con visión lírica un pie forzado.
Tríptico del Padre: Décimas a Carlos Manuel de Céspedes
Un sublime canto llama al combate, como la carga al machete engendra nuevas melodías. El verso se torna himno de batalla, tanto como la batalla despierta acendrados lirismos.
Reencuentro en el Ranchón
Sábado de lluvia veraniega en el atardecer al fondo de la Casa de la Décima Celestino García, de Pinar del Río, donde el Guamá exhibe su ancha corriente.
Celestino García. Rey de versadores
El Rey de los Versadores no escribió libros y su legado sencillamente es oral, fruto de la memoria popular y en ella el amor de los cubanos por la décima.